¿Qué haría usted si le dijera que la cosa más importante está en peligro? ¿Qué actitud tomaría? Mientras permanezcamos ignorantes ante el peligro que enfrenta el evangelio por nuestro deseo de preservar nuestra comodidad, y por el engaño de las narrativas rivales, no podremos efectivamente participar en la misión de Dios en el mundo